Treinta y cinco países de África subsahariana están utilizando los INFF para configurar el financiamiento para la recuperación de la pandemia de COVID-19 y la inversión en el desarrollo sostenible a mediano y largo plazo. A pesar de la interrupción de la pandemia, los gobiernos han logrado avances tangibles en sentar las bases para el desarrollo de INFF y adaptarlos a diferentes contextos de desarrollo.
Basándose en datos de encuestas de 25 países en África subsahariana, este informe proporciona la primera descripción general de cómo los países africanos están adoptando los INFF, los objetivos y beneficios previstos del enfoque INFF, y los pasos planificados para el desarrollo de INFF dentro de los procesos nacionales. Consulte el Panel de INFF para explorar los resultados completos de la encuesta.
Más de las tres cuartas partes de los países han formalizado o están en proceso de formalizar los comités de supervisión del INFF. Se están realizando evaluaciones de alcance con 26 países que utilizan una evaluación de la financiación del desarrollo junto con otros diagnósticos para dar forma a la fase inicial. Dos países han puesto en marcha hojas de ruta INFF y otros seis están desarrollando sus planes. Doce países de la región utilizarán el INFF para introducir una estrategia de financiamiento por primera vez, mientras que diez fortalecerán las estrategias de financiamiento existentes.
Los países de la región están utilizando los procesos del INFF para explorar y avanzar en una amplia gama de innovaciones en políticas, regulaciones, instrumentos e instituciones de financiamiento público y privado. Estas reformas movilizarán, apalancarán y alinearán el financiamiento con las prioridades nacionales de desarrollo sostenible, incluido el cambio climático y la transición energética, la igualdad de género y la protección social. Dieciséis organizaciones de la ONU y una amplia gama de otros socios internacionales, incluida la Unión Europea, están apoyando los esfuerzos dirigidos por el gobierno para construir un enfoque más integrado para financiar la recuperación de la pandemia y el desarrollo sostenible a mediano y largo plazo.