La Guía de evaluación de la financiación del desarrollo (DFA) describe un proceso para ayudar a los gobiernos y sus socios a adoptar un enfoque más integrado de la financiación de los ODS.
La desalineación entre las funciones de política financiera y de planificación del gobierno, un enfoque limitado en los recursos públicos para financiar los ODS y la participación de solo un grupo reducido de partes interesadas en la financiación del diálogo y la toma de decisiones son desafíos clave en muchos contextos.
El DFA ayuda a abordar estos problemas a través de un proceso de diálogo informado dirigido por un equipo de supervisión nacional, que involucra a un amplio grupo de actores de todo el gobierno, el sector privado e instituciones financieras, socios para el desarrollo y otras partes interesadas no estatales.